En el proceso post-adopción, ofrecemos apoyo al menor en la integración familiar, social, educativa y ambiental, así como apoyo en la gestión de sentimientos y emociones del núcleo familiar, estrategias de la vida cotidiana, construcción de una identidad personal, control de las emociones, sentimientos preadolescentes y adolescentes. 

Saber quien soy y gestión de la necesidad de búsqueda de orígenes.

El desgaste emocional que este proceso puede ocasionar en los padres y familia debe ser gestionado de la mejor manera posible, con técnicas y apoyos. 

En el momento que llega un menor a casa siempre es un proceso de aprendizaje, donde es necesario el compás de todos los factores para que el día a día sea de carácter normalizado.

En realidad se trata de detectar dificultades en el desarrollo global del niño o niña, pudiendo también observarse dificultades en los aprendizajes y/o la conducta. En algunos casos, es conveniente trabajar con reeducaciones psicopedagógicas u otras técnicas sociales que optimicen el desarrollo del niño/a.